El pago por tarjeta de crédito a través de una TPV Virtual contratada con un banco es uno de los métodos de pago más extendidos actualmente en Internet, junto con el pago a través de Stripe o el pago con PayPal.
A continuación hacemos un repaso por los puntos más importantes de este medio de pago, y las ventajas e inconvenientes del mismo.
¿Qué es una TPV Virtual?
TPV proviene de las siglas de Terminal de Puntos de Venta, y es Virtual porque no se encuentra en un negocio físico, sino en un negocio digital o virtual que se encuentra en Internet.
El TPV Virtual es un sistema de pago que puedes habilitar en tu página web y que se contrata con un banco, mediante el cual puedes empezar a cobrar por tus productos o servicios desde la propia web, recibiendo los pagos de forma inmediata.
Ventajas de usar TPV Virtual
Facilidad a la hora de realizar pagos
A diferencia de los pagos por transferencia bancaria, con la instalación de una TPV Virtual en la web, podrás recibir los pagos de tus productos o servicios de forma instantánea y en el caso de que tengas un e-commerce con productos físicos, empezar a gestionar el envío del pedido de forma automática una vez realizado el pago.
Múltiples tarjetas de crédito, débito o virtuales
Con la TPV Virtual te aseguras que los clientes puedan pagar con las tarjetas de crédito, débito y virtuales más usadas en el mercado.
Percepción de seguridad mayor por parte de los potenciales clientes
El hecho de que para terminar el pago sea necesario pasar por la página de una entidad bancaria, es una ventaja para muchos usuarios que confían más en este proceso que si tuvieran que poner los datos de la tarjeta en la propia web del ecommerce como pasaría con métodos de pago como Stripe. (Como ya comentamos en el post en le que hablamos de Stripe, según el público objetivo esto puede ser una ventaja o una desventaja)
Desventajas de usar TPV Virtual
Comisiones y gastos de mantenimiento
Deberás estudiar cuidadosamente las ofertas de TPV Virtual de los bancos que están en el mercado. Lo habitual es que dependiendo de la facturación mensual que tengas debas pagar unos costes de mantenimiento superiores, cuanto menor sea la facturación, además de un porcentaje de comisión que suele estar entre el 0,75% y el 1% por cada transacción.
Dependiendo de cuánto factures y si estás empezando en tu proyecto o no, puede que te salga más rentable optar por PayPal y/o Stripe, aunque las comisiones son mucho mayores, te ahorras los costes mensuales de mantenimiento.
Entorno menos amigable
Si bien es cierto que en los últimos meses y años los bancos se están poniendo las pilas para hacer más amigable el entorno de gestión de las TPVs Virtuales, PayPal o Stripe ganan la partida en este aspecto en la mayoría de las ocasiones.
El proceso de pago no se realiza en la propia web del e-commerce
Como ya comentamos anteriormente, esto puede ser una ventaja y desventaja al mismo tiempo. Se añaden con la TPV Virtual pasos intermedios en las que el usuario es redirigido a la página externa de la pasarela de pago bancaria para finalizar el pago. Como ya sabrás en un embudo de conversión, cuantos menos pasos haya que dar, menos clientes se pierden por el camino, pero en ocasiones a estos potenciales clientes les gusta más ver el logo del banco para que les de más confianza.
¿Qué necesitas tener para contratar una TPV Virtual?
Ser cliente del banco
En la mayoría de las ocasiones te pedirán que ya tengas una cuenta bancaria con el banco con el cual vayas a contratar la TPV virtual, incluso en ocasiones puede que te pidan que como mínimo hayas estado medio año con ellos.
Condiciones especiales según el banco
A parte de las comisiones y gastos de mantenimiento que variarán de uno a otro, es posible que cada banco te ponga unas condiciones adicionales que tendrás que aclarar directamente con ellos.
¿En qué casos debería contratar o no una TPV Virtual?
Deberías contratar una TPV Virtual si…
- Tus potenciales clientes son personas de una edad madura que necesiten más confianza para pagar por Internet.
- Tienes previsto en el corto o medio plazo obtener un volumen de ventas moderado.
- En cualquier caso si tus recursos no son limitados y puedes permitirte una cuota mensual durante los meses en los que tu facturación sea escasa.
Deberías obviar la opción de contratar una TPV Virtual si…
- Tus potenciales clientes son personas jóvenes ya habituadas a realizar pagos por Internet y usar servicios como PayPal.
- Si tu comercio electrónico está basado en compras de productos o servicios muy puntuales y de alto valor, en este caso, podría ser suficiente con aceptar el pago mediante transferencia bancaria.
Si te lo puedes permitir…
Si tus recursos no son escasos y te lo puedes permitir, en casi la mayoría de los casos, es mejor que habilites este procedimiento de pago por ser aún de los más extendidos y a través del cual la mayoría de los internautas están acostumbrados a comprar.
En conclusión
Tener una TPV Virtual en tu comercio electrónico a día de hoy, en la mayoría de los casos, sigue siendo un punto imprescindible para no perder por el camino potenciales clientes que se sienten más seguros pagando a través de este entorno que otros como los de PayPal o Stripe.
Es una lástima que el servicio de atención al cliente para este tipo de servicios de los bancos siga siendo en muchas ocasiones arcaico y no está gestionado por profesionales especializados en la materia que le pongan fácil este proceso a los propietarios de comercios electrónicos.
Si quieres implementar una TPV Virtual como forma de pago en el desarrollo y diseño de tu tienda online, ponte en contacto con nosotros y crearemos un e-commerce adaptado a las necesidades de tu público objetivo.